Marianne Brandt

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Basta un solo vistazo a los objetos de metal diseñados por Marianne Brandt durante su estancia en la Bauhaus para reconocer su tremenda modernidad y vigencia: diseños limpios y elegantes, de una claridad formal rotunda, prácticos, bellos en su funcionalidad…no exentos de, como dice Ulrike Müller, cierta “sutil extravagancia”. Sus lámparas de mesa no distan mucho del diseño de muchos flexos actuales. Los juegos de té, azucareros y ceniceros son resultado de la combinación armoniosa de formas puras y, generalmente son brillantemente resueltos con dos materiales: una sobria madera oscura para las partes que requieren la manipulación del utensilio y planchas metálicas de alpaca, plata, bronce o latón niquelado para formar su cuerpo. En algunas piezas, Brandt empleará para la superficie interior un acabado distinto; los encuentros entre madera y metal son resueltos con discretas pletinas que apoyan la coherencia formal de la pieza. Por citar algunos detalles más, destaco el reborde metálico de la lechera, que oculta y parece encajar el borde superior del asa de ébano; o el desplazamiento de la abertura superior de la tetera hacia el arranque del asa, que permite inclinarla para servir sin que se vierta el líquido por arriba; o la tangencia del hueco del cenicero con el soporte para el cigarrillo, que hace que éste flote sobre el vacío para que la ceniza siempre caiga al interior.

Tras leer algunas referencias sobre su paso por la Bauhaus, sorprende la postura abiertamente crítica al statu quo que mantiene Marianne Brandt: su fotomontaje “Mit allen zehn Fingern” (Con los diez dedos), pese a ser de fecha ligeramente posterior a su abandono de la escuela, dice mucho respecto a su crítica al sometimiento de la nueva mujer a los designios de un apolillado género masculino; su permanencia en el duro taller del metal, pese a las reticencias con las que se encontró, habla también de la firme voluntad de Brandt; su “Autorretrato con lirios” de 1923, con Brandt mirando directamente a la cámara, conquista por su carácter y seguridad, su fuerza y delicadeza.

Marianne Brandt, de soltera Marianne Liebe, nace en 1893 en Chemnitz. Su padre, abogado, procura a sus tres hijas una buena educación. De 1911 a1917, Marianne estudia pintura y escultura en la Escuela Superior de Arte del Gran Ducado de Sajonia, Weimar. Tras completar sus estudios, en 1918 obtiene su diploma; aquí había conocido a un estudiante de arte, el noruego Erik Brandt, con quien acabará casándose en 1919 y marchando por un año a Noruega para, posteriormente, estudiar arte en París. Sorprendida por lo visto en la exposición de la Haus am Horn (1923), en enero de 1924, Brandt ingresa en la Bauhaus, donde asistirá a clases de Albers, Klee y Kandinsky. Ese mismo año Gropius había encomendado a Laszlo Moholy-Nagy la dirección del taller del metal, cuyo rumbo cambiará para pasar del diseño de juegos de té al de aparatos domésticos. El propio Moholy-Nagy, convencido del extraordinario talento de Brandt, la convencerá para que permanezca en este taller. En octubre de 1924, Brandt ya ha superado su periodo de prueba y entra en el taller junto con Wilhelm Wagenfeld. Más del 50% de la producción del taller es atribuible a los modelos diseñados por ambos.

Con la mudanza forzosa de la Bauhaus a Dessau, Marianne Brandt y su marido Erik, marchan durante nueve meses a París, donde ella se centrará en sus montajes fotográficos, disciplina en la que destaca enormemente. Regresa a Dessau y, en abril de 1927, ingresa como empleada del taller del metal, pudiendo negociar contratos industriales para la producción de accesorios de iluminación. De abril de 1928 a septiembre de 1929 será la subdirectora del taller. Durante 1929, Brandt participa activamente en los debates sobre teoría del arte que tienen lugar en la revista “Bauhaus”, mantiene una intensa producción fotográfica y continúa su trabajo en el taller del metal. Su delicada salud y un conflicto de liderazgo en el taller son solo dos razones más que animan a Brandt a tomar un nuevo rumbo y abandonar la Bauhaus, no sin antes recibir su diploma del taller del metal. Entre 1929 y 1930 participará en sendas exposiciones de la Werkbund, donde expondrá sus fotos (Stuttgart) y sus objetos de metal (París).
Comienza una etapa de dura subsistencia para Marianne Brandt. Moholy-Nagy no deja de animarla y ayudarla en la medida de lo posible. Mientras tiene trabajo que ofrecerle, Gropius la incluye en su estudio de arquitectura: así, en 1929 colabora en diseño de mobiliario y decoración de interiores, especialmente para la colonia Karlsruhe-Dammerstock.

De 1930 a 1933, Brandt trabaja en la fábrica de metal Rupelwerk, en Gotha, donde diseña prototipos de objetos funcionales como carritos para el té, abrecartas, lámparas y tinteros. En 1933, ser mujer trabajadora en Alemania es una proeza imposible de conseguir. Marianne Brandt es despedida, con lo que vuelve a su ciudad natal, Chemnitz, con su familia, trabando allí como pintora y tejedora. En 1935 se divorcia de su marido.

A partir de entonces, su rastro es más difícil de seguir. Se sabe que Gropius mantuvo contacto con ella desde Estados Unidos y que le enviaba paquetes de ayuda que ella utilizó en un principio para la reparación de la casa de sus padres, dañada por las bombas durante la guerra.

De 1949 a 1951 ejerce de docente en la Academia de Bellas Artes de Dresde, en la sección de madera, metal y cerámica y de 1951 a 1954 da clases en la Escuela Superior de Artes Aplicadas de Berlín-Weissensee, bajo la dirección del arquitecto Mart Stam; también trabaja como diseñadora y consultora para la industria en el Instituto de Artes Aplicadas. En 1954 vuelve a dedicarse en Chemnitz a actividades privadas.

En los 60, el investigador Eckhard Neumann contacta con ella, también desde los Estados Unidos: de su larga correspondencia resulta el ensayo “Carta a las jóvenes generaciones”, incluido en el libro “Bauhaus and Bauhaus People” (1970).
En 1976, la exposición sobre la Bauhaus que tiene lugar en Leipzig recupera el nombre de Marianne Brandt. Ya muy anciana, Brandt vive por aquel entonces retirada en Kirchberg y dedica sus últimos años a la fotografía como medio de expresión artística. “Cuando Isabelle Anskombe contactó a principios de 1981, a través de Gunta Stölzl, con Marianne Brandt, ésta se encontraba en un asilo cercano a su lugar de nacimiento (antigua DDR) y quedó gratamente sorprendida del interés despertado”. Dos años después morirá en Kirchberg.

En 1999, dieciséis años después de su muerte, Weimar es declarada Capital Europea de la Cultura y, a modo de justicia poética algo tardía, el reconocimiento oficial aparece en forma de sello con el nombre de Marianne Brandt y una imagen de su preciosa tetera dorada…

Junto con Marianne Brandt, las autoras indicadas en el anterior post (Josenia Hervás, Carmen Espegel, Ulrike Müller, Magadalena Droste, Anja Baumhoff,…) me han descubierto artistas como la muralista Lou Scheper-Berkenkamp, responsable del diseño cromático, entre otros, del edificio de la Berliner Philharmonie de Scharoun (precisamente la muerte la sorprendería durante el diseño cromático de la Biblioteca Estatal de Berlín, en la que también participó); las esculturas abstractas de Ilse Fehling; los preciosos juguetes de Alma Buscher o el certero diseño de la taza-aeroplano de Marguerite Friedländer-Wildenhain. Pero hay muchas más: Lilly Reich (ya veterana cuando entró a formar parte de la Bauhaus), Ise Gropius, Grete Stern, Gunta Stölzl… Os invito a que os animéis a descubrirlas.

BIBLIOGRAFÍA:

“Bauhaus women” – Ulrike Müller – Flammarion – París – 2009
“Las mujeres de la Bauhaus: de lo bidimensional al espacio total “ – Josenia Hervás y Heras – Ed. Diseño – 2015
“Bauhaus 1919-1933” – Magdalena Droste – Ed. Taschen – 200
Archivo digital de la Bauhaus:
http://bauhaus-online.de/en/atlas/personen/marianne-brandt

CRÉDITOS FOTOGRÁFICOS:

«Bauhaus women” – Müller, Ulrike – Flammarion – París – 2009:

  • Bauhaus Archive, Berlín: A1,A6,B3,B4, C2,C4
  • Kupferstichkabinett Dresde / Staatliche Kunstsammlungen, Dresde: B2
  • Klassik Stiftung, Weimar: A5
  • Florence Henri, Scheper Estate: C3

«Las mujeres de la Bauhaus: de lo bidimensional al espacio total“ – Hervás y Heras, Josenia – Ed. Diseño – 2015: B5,B6,B7

“Bauhaus 1919-1933” – Magdalena Droste – Ed. Taschen – 2002: A2,A3,A4,A7,A8

Web: http://bauhaus-online.de/en/atlas/personen/marianne-brandt:B1

Web: http://www.shutterstock.com/s/marianne/search.html:C1

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